El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, confirmó mediante un comunicado este jueves que él y varios de sus colaboradores fueron investigado por la DEA por supuesto narcotráfico y lavado de dinero, pero aseguró que “nunca se encontró evidencia contra el presidente”.
El comunicado detalla que “esa investigación, realizada en el año 2015, determinó que ni siquiera había indicios para presentar cargos contra el gobernante hondureño o alguno de sus cercanos colaboradores. Así se establece en la documentación presentada ante la Corte del Distrito Sur de Nueva York como parte de las peticiones previas al juicio en el caso de Juan Antonio Hernández (hermano del presidente)”.
Cortesía CNN